miércoles, 28 de enero de 2009

Herencias


Esta tarde he acabado un periplo sanitario que me ha llevado varios meses de camino. Una Odisea en toda regla, salvo por las sirenas (o yo no las he visto) tampoco ha habido cíclopes, ni el médico tenía la mirada de Ulises, ni Nausicaa me guiaba.

Eso sí, he llegado a Itaca a las 7 de la tarde para decirle a mi madre cuánto le agradezco que en vida me vaya dejando herencias aquí y allá.
Primero me regaló una mala circulación de retorno, que cuando llega el verano me trae a mal traer. Luego me donó una bonita propensión a echar trasero y piernas en cuanto me descuido, que es continuamente. En mi tierna infancia heredé esta tendencia a templar gaitas en medio de todos las lides ajenas, lo que me ha causado no pocos sofocos y tormentos. Y hoy, el Ulises que no es Ulises, me ha comunicado alegremente otro nuevo legado de mi progenitora: bronquitis asmática de origen genético.
¿Es o no es generosa mi madre?

De modo que me he plantado en su casa al atardecer y le he soltado, brazos en jarra y vis cómica: oiga usted, señora mía ¿es que aquí no se heredan mejores destinos?
Como ya es muy, pero que muy mayor, ha tardado en reaccionar y su carita asustada me ha enternecido aún mas. Si la viérais cuando estamos juntas, también veríais que he heredado sus manos, sus ojos, su paciencia.
Así que, para agradecer sus legados, me la he comido a besos.


14 comentarios:

LA MAMI dijo...

JAJAJAJAJAJAJAJAJJA, QUE BUENA ENTRADA.
A MI ME LEGARON, Y NO SE QUIEN DE LA FAMILIAAAAAAA, PSORIASIS, YA ME GUSTARIA HABER AGRADECIDO A LA PERSONA EN CUESTION DE TAN GRATO LEGADO... PERO NO ESTA... PARECE SER QUE EN MI FAMILIA LA HE INVENTADO YO... NO SE SERA ALGUN TATARABUELO...
COMO LEGADO TB TENGO UN CULO APLASTADO Y UNAS PIERNAS UN POCO EXTRAÑAS... PERO VIVAN LAS MADRES LAS ABUELAS Y TODA NUESTRA PARENTELA.
Y LO DE LA BRONQUITIS ASMATICA ES UN LEGADO QUE TIENEN MIS DOS HIJOS PERO TAMPOCO SE SABE QUIEN SE LO DEJO EN HERENCIA...
ASI QUE VENTOLIN, ANTIESTAMINICOS Y PULMICORT .
ES LO QUE TOCA.
UN BESAZO GUAPAAAAAAAAAAAAAAAAAA

Anónimo dijo...

¿Es grave el tema de la bronquitis asmática? Habrá que vigilarla, supongo.
Pues yo tengo una mezcla de mis dos progenitores. Afortunadamente mi pelo es una mezcla del de mi padre y del de mi madre (uno tiene tres pelos y la otra una mata de africana despeinada, que es digno de ver al despertar).
Físicamente soy muy parecida a mi madre, pero tengo los ojos y la barbilla de mi padre. La verdad es que mi padre es guapísimo: un día colgaré la foto para deleite de damas (o a lo mejor son mis ojos de hija, ja, ja).
Tengo que agradecer a la genética que no me haya regalado las varices de mi madre ni la malformación craneal de Arnold Chiari.
Besos

Juan Antonio González Romano dijo...

Enternecedor, Mery. Cuídate. Y cuida a tu madre. Es una petición egoísta: asi nos tendrás cuidados a todos tus lectores.

José Miguel Ridao dijo...

Desde luego es un incordio esto de las malas herencias genéticas, pero no creo que haya que culpar a los padres, hay que remontarse más atrás: abuelos, bisabuelos, tatarabuelos... y así hasta Adán y Eva. Pero ¿quién fue de los dos, Adán o Eva? Aquí hay leña para la batalla de géneros. Mi resuesta: fue Dios quien nos creó, ¿no? Mejor hacemos caso a Darwin y damos la leña al mono.

Un saludo, Mery.

enrique dijo...

No estoy de acuerdo con lo del trasero. Y a fe que me he fijado bien...

En cuanto a la espiral de los genes, yo tengo varias cuentas pendientes con mis ancestros, pobrecitos mios.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Sin duda, has heredado lo mejor de tu madre. Una mujer que le ha dado a su hija su inteligencia, su ternura y una educación como para que su hija pueda escribir una entrada tan preciosa como ésta tiene que ser estupenda. Un abrazo

Anónimo dijo...

Entonces, ¿en qué quedamos con respecto a tu trasero? Porque un comentarista te discute tu afirmación sobre su tamaño.
Conste que es mera curiosidad, porque a mí los traseros femeninos me gustan todos. Y lo dejo ahí, que me conozco.

Mery dijo...

Mami, tu siempre tan graciosa y tan optimista.

Parsimonia: La foto de tu padre promete, yo espero a verla, para alegrarme el dia. Por cierto, doy por hecho que tu madre va mejor dia a dia.

Juan Antonio: gracias por tus cuitas, pero descuida, no soy nada hipocondríaca y le daré al tema la importancia justa, es decir, poca.

José Miguel: muy ocurrente tu idea, voy a pedir responsabilidades. Aunque esto que acabo de deir me suena a política barata. Mejor no.

Enrique: el tema de mi trasero, mejor no hablar de ello, que tengo la sensación de que aumenta con sólo nombrarlo.

Jesús: tu comentario me deja sin palabras; cuidado, no es bueno para mi vanidad, aunque te lo agradezco enormemente, sobre todo por lo que a mi madre respecta.

Octavio: no hagas caso a Enrique, es muy educado y creo recordar que a veces la vista le falla.
Y nada, si esta entrada te ha dado ideas para tu blog, a por ello...

Un beso a todos. Sois la perfecta compañía para acabar el día (rima y todo).

Rafael G. Organvídez dijo...

Como ves, Mery, somos muchos los que heredamos esas incomodidades (y, por desgracia, no en todos los casos). Yo padezco de una alergia asmática que también me da alguna que otra "alegría".
Un saludo

Javier dijo...

Nunca te olvides de que ¡¡ Honra merece quien a su familia se parece !!

Mery dijo...

José Ignacio: a las heencias de este tipo hay que echarles humor, y tu bien lo haces, por lo que veo. Muy inteligente.

Pe-Jota: refrán atinadísimo, haces bien en recordarlo.

Un abrazo

Terpsicore dijo...

Muy buena entrada y muy cierta.
Me vas a hacer pensar todo lo que he heredado. Algunas cosas desde pequeña te lo dice la familia, la gente y sabes que tienes las piernas de tu madre y la nariz de tu padre,etc. Voy a observar más detallitos.

Mery dijo...

Hola, Terpsicore: seguro que te va a resultar muy interesante observarte al detalle.
Bienvenida, por encima de todo.

Antonio Rivero Taravillo dijo...

¡Qué bonito vestido rojo llevas, Mery!