viernes, 29 de febrero de 2008

Lo que amo de Sandra...............Lámina 12



Entró en mi despacho como un pajarito desvalido, aunque su mirada intentara mostrar una mujer segura y firme. Su paso era dubitativo y sus hombros caían ligeramente hacia delante cuando estrechó mi mano. Yo, que he pasado por varios cursos de liderazgo y superación personal, sé muy bien de lo que hablo, y a ella la calé de inmediato. Una vez que clasifiqué su prototipo (me jode hacerlo con todas las personas que conozco, pero estoy deformado en lo personal por culpa de lo profesional), pasé a pormenorizar su aspecto con rápidas miradas que ella no apreció. Rubia teñida, imagino, eso me daba igual, de melena larga, que intentaba ahuecar en ademán muy femenino, pues venía chorreandito la pobre con el dia de demonios que hacía afuera. Los ojos color miel de mirada lánguida - eso me pone en las mujeres , las imagino gatitas melosas y deseosas de acurrucarse entre tus brazos -. Sandra tiene la sonrisa fácil, siempre, incluso cuando se enfada, eso me encanta de ella. Es un ángel. Lo intuí el primer dia y jamás dejé de pensarlo. Su boca grande, grande, grande - también eso me pone -. Llevaba los labios recién pintados de marrón, a juego con su jersey; se los debió retocar mientras la arpía de mi secretaria se hacía la interesante anunciándome su llegada. Las manos bien cuidadas, pequeñas, muy vivarachas. De su cuerpo nada que objetar. Ya intuí unos pechos medianos bajo su cuello espigado, y no me equivoqué, pocas veces algo se me escapa en cuanto a pechos se refiere. Es de las que no le hace falta usar wonder bra, o como se diga, ni relleno de copas, o como se diga. Lo que tiene está bien puesto y punto. Durante el tiempo que estuvimos juntos, unos 3 años, la oí quejarse alguna vez de sus kilitos de mas, ya se sabe, lo que todas las mujeres. Joder, con lo que nos gusta a nosotros ese culo redondito y esas piernas carnosillas, y no esos palitroques de modelos que no gustan a nadie, salvo a ellas. Para mi que están locas de atar, qué obsesiones. Bueno, Sandra no es así, al menos no lo es mucho, a ella le dá un poco igual todo el tema de la figura y demás. Sólo le preocupaba estar guapa para mí, saberse deseada y querida, y desde luego que la he querido y la he deseado, como a ninguna.

La mañana que nos conocimos yo estaba de mal humor porque en casa todo eran preocupaciones, por mi mujer y por mis hijas, y habíamos tenido una pelotera de la leche mientras desayunábamos en la cocina. Sandra me devolvió la sonrisa y la confianza en el mundo femenino, tan deteriorado para mí en esos dias. Fué tan afable, tan fresca y natural, sus ojos eran tan limpios incluso cuando leía un documento (momento que yo aprovechaba para observarla mejor) y su boca ya he dicho que me ponía. Con un lapiz subrayaba no sé muy bien qué, y luego se lo metía entre sus pequeños dientes, y mi mente empezaba a fantasear. La noté nerviosa casi todo el tiempo, quizá porque el tema que tratábamos tenía que ver con su jefe o porque le quedaba grande todo aquéllo. Como soy un poco vanidoso también quise creer que era por mi abrumadora presencia, pero realmente ella no me dió motivos para afirmarlo, y no me atreví a invitarla a comer cuando se despidió de mí con un simple "hasta pronto".

Estuve pensando en ella todos los dias que siguieron, me la imaginaba de todas las maneras posibles, en su trabajo, en su casa, andando por la calle y moviendo ese precioso trasero........Si, joder, también la imaginé en mi cama, o en la suya, en una cama cualquiera. ¿Cómo serían esos ojos melosos ardiendo de pasión? ¿Y esa boca sin carmines, desgastada bajo mis besos?

Aunque no tenía nada que ofrecerle aún por nuestro trabajo pendiente, una semana mas tarde la llamé a su móvil, que había camuflado en mi Blackberry con el nombre de Sanz 2 (Sanz es un compañero del despacho. Por si a mi mujer le daba por espiar, cuidadito). Era ya tarde, sobre las 11 de la noche y yo estaba en Londres, aburrido de mis papeles y mis pensamientos. Sandra estaba en casa, y yo la suponía dulce y sexy con su ropa de dormir, o mejor sin ella, qué coño, seamos sinceros. Al oir su voz sorprendida sentí como un respingo en el estómago. Yo mismo empecé a tartamudear, porque en mi precipitación no había previsto una excusa viable para esas horas intempestivas. En seguida empezamos a reir y la conversación tan fluída y alegre nos tuvo embobados casi una hora; hablamos de Londres, de Madrid, del libro que estaba leyendo cuando la interrumpí. Recuerdo que ella comentó lo cara que me saldría la llamada y me preguntó si usaba el móvil de la empresa; le contesté "no, es mi teléfono y me dá igual". Y ella soltó un "uff, menos mal" ¿menos mal qué? Nada, cosas mias. No, dime qué es ese menos mal. No. Si. No. Si. Bueno, es que no soporto a los tios que gastan a espuertas cuando paga la empresa y con su dinero son tacaños de narices, y menos si ganan una pasta. Joder, Sandrita, vivan tus huevos. Siempre me extrañó el grado de confianza y complicidad que entablamos Sandra y yo desde el primer momento. Una hora de palique y ya podíamos soltarnos palabras malsonantes sin falsos rubores. Tenía la sensación de conocerla de toda la vida y a ella le ocurría igual, según fuimos confesándonos en encuentros posteriores.


Después de colgar me quedé un buen rato tirado en la butaca y mirando el teléfono como un gili. Caí en la cuenta de que me dolía un poco el estómago.....pero no, no me dolía, es que lo tenía estrujado como un adolescente recién enamorado. Vamos, Arturo, no me jodas ahora, me dije. Pues si, por ese estrujamiento fuí consciente de que la rubita me estaba interesando mucho mas de lo que suponía y el calentón inicial de imaginarla casi desnuda había sido sustituído por una dolencia estomacal de difícil tratamiento.

Volví de Londres un dia antes de lo previsto, no ansioso de ver a mi familia, claro está; ahora ya sabéis por qué.

jueves, 28 de febrero de 2008

Arturo y Sandra (El Encuentro)...............................Lámina 11


Me ha llegado el turno de contar cómo nos conocimos mi amado y yo (aún no puedo calificarlo de ex amado, porque continúo enganchada a su rastro como una posesa), pero eso es tema para otro dia.

Ya he dicho que Arturo es abogado; bien, pues en aquellos dias su bufete llevaba un caso de entramados mercantiles en el que uno de los implicados era mi jefe, nada ilegal, aclaro, pero todo muy complicado y pesado de organizar. Mi jefe me pidió que yo llevara el tema y por ello tuve que presentarme oficialmente en el despacho de su abogado - el interfecto-, cargada hasta las cejas de carpetas y cds. Era un 4 de abril, bien lo recuerdo, lluvioso, perfecto, de los que a mi me gustan .

Llegué muy pillada de tiempo, un poco azorada, porque suelo ser muy puntual en mis citas profesionales, y me descoloca parecer informal. Su secretaria, mujer que sin duda debía ser muy eficiente, pero también muy borde, me miró con cara de pocos amigos sin apiadarse de mis brazos doloridos por el peso ni de mi pelo desaliñado por la lluvia, y me recalcó bien clarito que Don Arturo me esperaba hacía ya rato. Una bruja, ya digo. Me pasó a una salita decorada en gris y me hizo esperar al tuntún, mientras yo pensaba "joér, si tan preciado es su tiempo, a qué tanto relajo ahora". Una bruja, repito, seguro que a Don Arturo ni le dijo que había llegado la pringada de la empresa X hasta pasados 10 minutos. Bueno, sigamos, que me entretengo con las musarañas. El caso es que cuando le dió la real gana vino por mí para conducirme, muy estiradita y silenciosa, al despacho de su jefe, del hombre que íba a poner patas arriba toda mi existencia con el simple acto de traspasar su puerta.

De primeras Arturo me quitó de las manos buena parte de la carga que ya amenazaba con dejarme manca para los restos, a la par que quitaba importancia a mi retraso porque "estos dias de lluvia Madrid es un churro de tráfico", y me dedicaba una media sonrisa blanca y morena. Mi nerviosismo íba en aumento piano piano........Me hizo sentar frente a él y su par de ojos pardos y en ese estado anduvimos casi una hora aclarádonos con el caso, comentando el método que él ya había previsto, etc, etc. Entre medias, uns cuantas llamadas interrumpiendo brevemente (que él solventaba con mucho arte y educación), y la bruja asomando su verruga peluda por la puerta por si deseábamos un café - para mí que nos espiaba - .

Si algo me sedujo de Arturo por encima de todas sus cualidades, en esta primera toma de contacto, fué su sentido del humor, con qué gracia me sacaba de errores o divagaciones - muy propias en mí cuando el corazón me galopa como un pura sangre -. Su media sonrisa pasó a ser abierta y franca, y al final, una carcajada tras otra nos unió ya irremediablemente, aunque éramos aún muy ignorantes de lo que se nos avecinaba. Nuestros ojos se debatían intermitentes entre miradas largas y evasiones absurdas hacia la ventana, la lámpara o el cenicero, y yo tiré varias veces su lápiz al suelo. Él jugueteaba con unos clips, los deshacía y deformaba con sus grandes manos hasta que acabó tirándolos a la papelera con un gracioso "ya ves, Sandra, cómo me voy cargando media oficina ". Adorable.
Su voz sonaba, su voz es....perfecta. Varonil, no muy ronca pero grave, bien modulada, calmada, idónea para los varios idiomas que luego me enteré que dominaba. Siempre supo utilizar correctamente ese don suyo para seducir a la gente, incluída yo. Voz y labios, bonita combinación para perderse en ellos.......

Cuando por fin me levanté de la silla ya tenía muy claro que ese hombre me gustaba a rabiar, e intuía que yo a él también, aunque fuera solo un poco, porque al despedirse y darme dos besos casi me abrazó como a una novia. Me pidió mi teléfono personal "para evitar interferencias en nuestras comunicaciones " - qué pillín - y yo no tardé ni un segundo en soltarle las nueve cifras como una locomotora - qué pillina -. Me acompañó hasta el descansillo del ascensor y me volvió a soltar un par de besos, ahora mas delicados. "Lo he pasado muy bien contigo" , me dijo, como si hubiéramos estado en el cine o cenando; " Eso suena muy poco profesional" , pensé yo, pero me lo callé y solo supe responder con una sonrisa colgate envuelta en un rubor integral, y un "hasta pronto ". De lo que sucedió el resto del dia 4 de abril no tengo constancia, para mí solo hay una imagen, un sonido y un ataque al corazón.

Ah, por si alguien se ha engañado con la imagen de este post, no, no hubo sexo de ninguna clase encima de su mesa. Eso lo dejamos para mas adelante.




martes, 26 de febrero de 2008

Dejad que los niños se acerquen a mi......Lámina 10


A mediodía, volviendo del trabajo, me he sentado en un banco cerca de mi calle a repasar unos papeles de cierta importancia. Al lado mio, una fuente, y en ella tres hermanos de corta edad discutiendo y empujándose por ser el primero en beber y mojarse de arriba abajo. La abuela en vano repartía cachetes a unos y otros, tan desaforados como estaban entre gritos, palabrotas y patadas al vuelo.

Automaticamente me ha venido a la memoria la otra cara de la moneda, una linda historia real contada por un amigo misionero que trabajó varios años en un país latinoamericano. Él vivía en un pueblecito limítrofe a un gran desierto, muy humilde y necesitado, como es lógico imaginar. Una tarde le avisaron de urgencia para que asistiera a un par de hermanitos que acababan de sufrir un accidente grave. Cuando llegó a la paupérrima Casa de Socorro se encontró con un niño de unos 8 años, casi ileso, gracias a Dios, y su hermana , de 5, que se íba a pasos agigantados por una hemorragia que no lograban contener, y sin tiempo para trasladarla al hospital mas cercano. El médico del dispensario sólo podía intentar una transfusión de su propio hermano, suponiendo temerariamente que tendrían el mismo grupo sanguíneo. El sacerdote, mi amigo, se acercó al niño, le preguntó su nombre y le dijo, con suma dulzura:
"Juan, tu hermana está muy malita. Para ponerse buena necesita que tu le des un poco de tu sangre. Como eres un chico tan grande y fuertote, seguro que si se la das, no se muere" El niño no dudó un segundo y en un periquete andaba enganchado a agujas y bolsas, sin una sombra de preocupación ni temor en su cándido semblante. Cuando por fin le quitaron del brazo toda la parafernalia del trasvase, se volvió a mi amigo, y, con los ojos mas tiernos y serenos del mundo, le preguntó:
"Padressito, ¿ahora es cuando ya me muero yo?.


lunes, 25 de febrero de 2008

Arturo y Roberto..................Lámina 9


Arturo y Roberto, Roberto y Arturo, tanto monta y nunca mejor dicho. Creo que debo contar cómo es su historia para ir teniendo el panorama completito de esta especie de novela por entregas. Para empezar Arturo tiene ahora 46 años, 43 cuando me conoció a mí y 41 cuando tropezó con su Rober. Hasta el nombre me cae gordo, Rober, suena a maricón enfermo, y no es que tenga animadversión a los maricas, Dios me libre, salvo a éste, y mis motivos tengo. A lo que íba: Arturo ( a partir de ahora "A", porque he notado que escribir su nombre me revuelve el hígado), es abogado en una gran firma internacional, de las que tienen despacho en América y varios paises de Europa. "R" (escribir su nombre me revuelve aún mas), es también abogado de la misma firma, pero en Barcelona y hete aquí que en unas Navidades blancas la empresa los reunió a todos en una gran cena en no sé qué hotelazo de veinte mil estrellas. Allí se conocieron por amigos comunes, un par de gays camuflados de los que nadie sabía nada, y que bien se encargaron de buscarle al Robertito el mejor y mas atractivo socio de Madrid. Al parecer solo se cayeron moderadamente bien esa noche, o al menos "A" no cayó en la cuenta, pero el otro ya le había echado el ojo y no tardó ni quince dias en echarle el lazo. Con motivo de las vacaciones, el catalán se quedó en Madrid y le llamó al despacho con una excusa cualquiera para quedar a comer y un café, y un paseo por el barrio de Chueca que estaba a tiro de piedra. Los primeros dias los pasó tejiendo su tela de araña tan sutilemente que "A" no recordaba cómo había llegado con él a una habitación de hotel de las afueras. Se sentía embriagado de manera extraña, casi drogado por la demostración de admiración que "R" le regalaba a cada instante, y entre besos y embelesos terminaron revolcándose como perros en celo. Una, dos, tres batallas de Titanes, y "A" completamente embobado con el efebo caído del cielo. Un inciso: si decimos encoñado cuando un hombre se angancha de una mujer ¿cómo diremos cuando un hombre se engancha sexualmente de otro? ¿Empollado, envergado? Puf, qué vulgaridad. De esta guisa amaneció una mañana mi cándido Arturo, sin saber qué hacer consigo mismo y con su sexo, ni mucho menos con su camada familiar, pues no olvidemos que estaba casado y con hijos.

"R" se dedicó desde entonces a chuparle bien la sangre (evito imaginar otra serie de escenas), a presionar su vida forzando encuentros absurdos y a trepar a su costa en la compañía, consiguiendo que este idiota lo reclamara para su grupo de trabajo en Madrid. En cuatro meses se plantó a vivir aquí, en un apartamento pagado por la empresa en la mejor de las zonas que él mismo eligió con todo descaro. Tonteó y maleó a "A" a su antojo unos cuantos meses mas, y después, con una ligereza ofensiva pasó a tirarse a media población masculina, porque, según le explicaba a su amado-embobado, había que vivir la vida y Madrid era un pozo inacabable de excesos y paraísos múltiples. "A" comenzó a sufrir muchísimo, de celos y de conciencia reconcomida por su familia , a la que tenía abandonada casi 24 horas al dia, amparándose en reuniones interminables de trabajo. Hasta que un buen dia su queridísimo Rober decidió que Madrid ya cansaba y que pedía el traslado a Londres, donde era muy probable que ya tuviera otro insustancial esperándole abierto de brazos y de alma. Un añito mas o menos le duró a "A" esta aventura extra extra, porque mas extra no pudo ser, y otro año de pastillas le costó deshacerse de su recuerdo y sus caprichos.
La tarde que me contó toda su experiencia gay delante de un descafeinado, muy abrazado a mi, casi tiritaba de nervios oprimidos, descargando su conciencia , pero sin soltar una sola lágrima, lo cual me hizo albergar la ciega esperanza de que quizá ya no amase a ese canalla con cara de Leonardo di Caprio, aunque en ese momento se encendiera una luz roja de alarma ante mí, ínfima, es verdad, pero persistente. Mi sexto sentido funcionaba de P.M. pese a que yo intentara vendarlo como una momia de la tercera dinastía.
Y ahora, unos años después, vuelta a las andadas; el fantasma de la ópera ha hecho sonar sus cadenas con dulce tintineo arrasando como un tornado varias vidas........
Mi querido Arturo, en qué ciénagas de porquería andas otra vez metido. ¿Quién va a lamer después tus heridas? Dime. Porque las tendrás, y esta vez mas profundas que las anteriores.

El Harén.................lámina 8


He pasado la tarde con Flor, Merche y Lidia. Como siempre primero hemos ído al cine, que suele ser la excusa para combinar una buena merienda con palabras, porque en realidad lo que nos gusta es vernos y que cada cual cuente lo que tenga que contar. No sé muy bien qué reglas ocultas rigen estos encuentros, pues de forma natural y sencilla suele ocurrir que una de nosotras tome la palabra y la reunión pase a tener un monotema que desarrollar ad infinitum. Hoy le ha tocado el turno a Flor, pero hoy estaba cantado que hablara ella. Flor ha tenido su tercera cita con Alvaro, uno de sus contactos de internet. El asunto comienza a tener miga, y cuento por qué : ambos están separados, con hijos creciditos y por consiguiente libres de ataduras, con mucho atractivo para el otro sexo y liberados de mente y cuerpo, se gustan a rabiar y cuando están juntos no consiguen mantener alejadas sus bocas. Pero hay una pequeñez que no logran salvar: Alvaro solo quiere encuentros esporádicos porque ella no es la única en su harén, aunque ahora parezca ser la favorita ( eso nadie lo duda). Y Flor no quiere ser favorita de harenes, sino Sultana soberana de su corazón, además de su boca. Lidia, Merche y yo sospechamos a estas alturas de la conversación que ha habido mas que besos y revolcones sobre un sofá fino de color beige, pero si ella no quiere contarnos mas, a callarse todas, que los detalles escabrosos pueden esperar . Entre que yo opino y tu también nos han dado las 11 de la noche, se nos ha acabado la merienda y hemos pedido café.

Un silencio de recapacitación y vuelta a las trincheras.

Flor, entre dolida y serena, nos dice que él no la va a llamar mas porque le ha dejado muy clarito lo que ella quiere. Merche lo ve así también, pero como va estando cansada ya no se molesta mucho en defender su idea y se limita a emitir sonidos tipo ummm, ahá, muy típico en ella cuando el tema deja de interesarle. Lidia y yo tenemos la certeza de lo contrario. Alvaro es un apuesto madurito maestro en estas lides y tiene a mano el capote, las banderillas, los picadores, el estoque y la cuadrilla entera para rematar la faena de la temporada. Se ha encerrado, como Jesulín, en la plaza con sus X vaquitas para él solo (ó x + 1, quién sabe ya ) y quiere salir a hombros por la puerta grande ....... .....Curioso, muy curioso, cómo he pasado de harenes orientales al arte del toreo, debería analizar esto con un psicólogo ¿no?
Casi daban las 12 en el reloj cuando decidimos levantar el tenderete, exhaustas de imágenes e hipótesis, y con una apuesta en el aire : dos a dos a que de nuevo el Galán asoma, o no, por email en la vida de Flor. Como que se va a perder ese cuerpo serrano recién conquistado. Ahora a esperar toca, aunque algo me dice que no esperaremos mucho. Un par de besos multiplicados por 3, ya nos contarás, no habrá nada que contar, bueno ya veremos, jajajaja.....y hasta otro dia. Por cierto, la próxima vez elijo la película yo.
Mery

sábado, 23 de febrero de 2008

Reivindicaciones varias..............Lámina 7


Hoy tengo el dia rebelde y con ganas de exigir a diestro y siniestro, con que empecemos :
A/a del Organo Competente:
reivindico ser una mujer con muchos momentos para mí sola, sin tener que aparentar estar ocupadísima, liadísima y agotada al acabar el dia y sin que las demás féminas me miren por encima del hombro por tan envidiable motivo. Reivindico el uso obligatorio de la sombrilla en los dias de sol para evitarnos tener que comprar esas cremas tan caras con índice de protección solar xxx y esos tratamientos de belleza que no son sino sacacuartos de alto standing. Reivindico volver a utilizar palabras y frases en desuso tan bonitas como "sería tan amable de...., que pase usted un buen dia,caballero, crápula, albricias, bajo el ala aleve del leve abanico ......" Y hablando de abanicos, también desearía la vuelta de su uso y el lenguaje oculto de su aleteo.
Reivindico el derecho de los padres a poder echar a sus hijos de casa cuando éstos son insoportablemente mayores y caraduras, aunque no tenga nada que ver conmigo en este caso. Reivindico el antiguo luto que, con el mayor respeto, permitía a los sufrientes mostrar su pena el tiempo necesario (es obvio que no reivindico su reverso de ostracismo y aislamiento, tan crueles y desacordes con la razón) . Reivindico ese antiguo arte epistolar entre amigos y familia porque estoy harta de recibir solamente en mi buzon cartas del banco. ¿Hay mayor emoción que leer esas hojas plegadas que comenzaban por " Mi querida hermana Julia: por la presente te comunico...." ? Reivindico el arte de la seducción, con sus tiempos y sus pausas, al antojo de las circunstancias, el azar y las personas. Reivindico los besos y abrazos sin vergüenzas ni pudores, esos te quiero como sin venir a cuento, pero que siempre tienen su porqué. Reivindico que por fin puedan amarse una mujer mayor y un jovencito sin asomo de sospecha económica de por medio. Y por supuesto también lo contrario. Reivindico el derecho a no querer ser madre o padre. Reivindico ser una mujer cañón y no tener porqué tirarte a todo bicho viviente, ni que esos bichos vivientes quieran tirársete a la mínima de cambio. También reivindico ser fea como un pecado y tener derecho a que alguno quiera echarse encima de ti, varias veces al mes por lo menos.
¿Y qué fue de aquellos piropos callejeros que hacían ruborizar a las paseantes y te dejaban satisfecha para el resto del dia? Para muestra un botón castizo : "con una de tus pestañas, niña de mi alma, he de ahorcarme yo." Chulo de los pies a la cabeza ¿a que si? Pues reinvindico la inmediata incorporación de hordas de piropeadores en las calles de Madrid. Esto no es negociable, además.
Por último, reivindico el silencio, ese silencio del que nos vemos privados casi las veinticuatro horas del dia.

jueves, 21 de febrero de 2008

Mecagoentoloquesemenea..................Lámina 6


De vuelta de mis vacaciones encontré un email de Arturo en el trabajo. Estaba inquieto porque no había recibido una sola palabra mia en respuesta a su último bombazo, unas breves líneas interesádose por mí, por la playa, y un beso de despedida con todo su cariño. Si he de ser sincera lo esperaba, mas sincera aún, lo anhelaba con todas mis fuerzas, me moría por saber si aún me tenía en su pensamiento de la manera que fuese. Respiré gozosa al leerlo y continué con mis quehaceres laborales tantos dias olvidados, sin la mínima intención de contestarle por el momento. Su imagen me acompañó el resto del dia como una sombra amada y funesta, lo que me debió colocar una expresión de lela ensimismada de la que era consciente pero incapaz de espantar de mi lado. Así he pasado unos cuantos dias, entre un no ubicarme en el trabajo, ni en mi casa, ni en mi recien estrenada situación sentimental, sin saber qué hacer con mi corazón partío y recompuesto a medias con las tiritas que le endosé oyendo a Alejandro Sanz. Esta tarde, por la Castellana, me ha parecido verlo en el Ford que paraba paralelo a mi en cada semáforo (Arturo no tiene un Ford). Luego he creído ver su perfil vestido de color garbanzo cruzando un paso de peatones (jamás lo he visto usando ese tono). Su voz sonaba provocadora en Kiss F.M (por supuesto Arturo nunca tuvo intención de ser locutor de radio). Toda yo era suspiro va suspiro viene, y hasta he puesto el limpiaparabrisas en un momento en que las lágrimas me nublaban la visión, creyendo que llovía a cántaros en la calle. Subiendo en el ascensor he decidido llamarle con todas las consecuencias bien asumidas, así que al llegar a casa me he quitado los zapatos, me he sentado cómoda en el sofá y he marcado su número de móvil temblando de impaciencia...
- Un segundo, preciosa, que acabo una conversación ( y al punto ha despachado en perfecto francés a su interlocutor por el otro teléfono, asunto de trabajo). Si estás en casa mejor te llamo y dejamos los móviles ¿te parece?
- Si, mejor. Cuelgo.

Ring, ring, respiro hondo y descuelgo mi teléfono de casa:
- ¿Cómo estás, mi niña? (ese "mi niña" me deja desarmada y él lo sabe).
- Bien, bueno, bien, he vuelto hace poco de las vacaciones.
- Si, lo sé. ¿Sabes? He estado muy preocupado por ti. No respondiste nada a mi email y me mordía las uñas de desesperación.
- No sabía qué decirte, qué podría decirte, Arturo.
(Silencio de varios segundos).
- Siento todo esto, Sandra, no me encuentro nada bien, ni por mi ni por ti, pero me jodo y asumo el chaparrón que me corresponda.
- Puf, déjate de chaparrones. Creo que te van a venir buenas tormentas con el chulo de tu novio. Lo sabes de sobra.
- No hace falta que me digas nada que yo no sepa...
- Y si lo sabes, por qué, entonces....
- No me preguntes por favor, estoy muy jodido.
- Bueno, pues solo te puedo reprochar que dieras por acabada nuestra relación por carta. Es lo mas vulgar que puede hacer un amante. Un amante que ha tratado a su amante como una simple amante (aquí ya la idiota de Sandra con un nudo en la garganta y la voz quebrada por completo).
- Sandrita, nunca nunca nunca te he considerado solo mi amante. Te he querido como a ninguna otra mujer y tienes ra....
- Si - le he cortado yo como una fiera - pero ahora resulta que quieres a un hombre, a un subnormal que te hizo la mayor guarrada del mundo, que es un chuloputas, y un maricón de mierda - sollozos y mas sollozos y un largo silencio por ambas partes.
- Arturo, mejor te dejo ahora, no puedo seguir hablando.
- Como quieras. Te llamaré un dia con calma ¿quieres? Lo siento, mi vida, lo siento.
- No me llames mi vida. YA NO SOY TU VIDA
Y le he colgado con una fuerza que le debo haber roto el tímpano. En realidad estaba furiosa conmigo misma, porque no me soporto cuando lloro así de incontrolada, porque no puedo evitar derramar un rio eterno de lágrimas y lamentos y me siento irremediablemente ridícula.
Ahora, media hora después, estoy sentada en la cocina, ante una tableta de chocolate muy avanzada, un bollo suizo, una copa de vino (vaya mezcla), dos magdalenas y una caja de kleenex, todo bien extendido frente a mí y en perfecto desorden. Coño, ojalá fuera un pulpo para abarcar de una vez las ansias con las que ataco mi banquete.
Vaya un papel que has hecho, me digo, bonito numerito de petarda despechada ¿para eso le has llamado? No sé para qué le he llamado, me respondo con la boca llena de suizo, quizá solo quería oir su voz cálida y profunda llamándome, una vez mas, "mi vida".


martes, 19 de febrero de 2008

Borges bajo llave


Que de Borges sólo se puede hablar maravillas, huelga decirlo. Yo lo descubrí pronto, en el colegio, porque El Aleph era lectura obligada en esos años. Desconozco si aún continúa en la lista de favoritos del Ministerio y de las Comunidades Autónomas, espero que sí, por mi fé en la sensatez de lo que debiera ser la educación en este país. No voy a relatar en este párrafo sus datos biográficos, para ello basta abrir la Wikipedia, Encarta y otras páginas similares, amén de las enciclopedias de papel que pululan por nuestras casas. Si acaso me permito recomendar sus Ficciones en pleno, sus Cuentos, comenzando por al Aleph, Funes el Memorioso, El Sur, etc. Su Historia de la Eternidad es otra joyita para echarla de comer aparte: en ella se ocupa del tiempo y su negación, de la doctrina del eterno retorno, en fin, alhajas varias. Hay quien desconoce que además nos dejó Borges una extensa obra poética, de calidad y profundidad poco frecuente; quizás algún dia me ponga lírica y cuelgue aquí alguno de sus poemas, para deleite de unos cuantos blogeros y horror de otros tantos.

Pero lo que en realidad quería comentar de mi personaje es que también tuvo su lado picaronzuelo, como todo hijo de vecino, y que tras ese carácter taciturno y un poco agrio, sólo un poco, hubo una vez un jovencito visitador de casinos y burdeles. Hace pocos años salió a la luz la correspondencia entre Borges y el poeta mallorquín Jacobo Sureda, que había permanecido dormida en el desván de la casa familiar durante unas cuantas décadas. En ellas habla de su bachillerato truncado en Ginebra y de sus amores con la bella Concepción Guerrero, una joven morena de largas trenzas. Mucho mas sabroso deber ser el carteo con su compañero del Liceo, Mauricio Abramowicz, un judío ginebrino cómplice de confidencias mas libertinas y mundanas. Estas cartas estuvieron ocultas muchísimos años en la caja fuerte de un banco suízo y finalmente fueron subastadas por los herederos de Abramovicz. Un coleccionista argentino, del que no tengo ningún dato, las adquirió y colocó en manos de María Kodama, su viuda, para que pudieran publicarse y aumentar las delicias de sus lectores. Aquí, por fin, asoma un Borges asombroso, alejado de su perfil mas tópico : un Borges asiduo del Casino, jugador obsesivo de la ruleta, que inventa martingalas para ganar facilmente y que invierte el dinero obtenido en largas noches de placer en el prostíbulo Casa Elena, de Palma de Mallorca. Un tiempo después dedicó a dicha Casa y a "sus Elenitas" una prosa ultraísta subtitulada "Hacia una Estética del Lupanar en España" . Desde luego poco que ver con la imagen oficial de ese pudoroso gentleman latino, de puritana educación victoriana, tutelado por una madre fuerte y longeva y desdichado permanente en amores.

Haciendo gala de mi pereza he de decir que no he buscado mas referencias de estas misivas de juventud, quizás ahora que las nombro me dé por indagar en sótanos y desvanes y saque mas jugo al morbo - íba a decir insano, pero me abstengo- de este querido juerguista.


domingo, 17 de febrero de 2008

Séptimo dia de vacaciones.............Lámina 5


Ya voy superando estos dias tan patéticos en mi vida, lo que no quiere decir que vaya superando nada de nada mi disgusto con Arturo. Ayer era la fecha prevista para que él vinera a reunirse conmigo ansioso por lanzarse a mis brazos y a mi cuerpo entero, como otras tantas veces, por eso anoche me metí en la cama a las 10 y no quise saber nada de Pablo ni de su novia, ni de sus gin tonics. Voy bajando el nivel de alcohol nocturno, que ni me sienta bien ni me hace olvidar un solo instante al Innombrable. Acostarme temprano no implicaba dormirme inmediatamente, qué ilusa fuí, así que tuve que soportar ver pasar ante mí algo así como trescientas escenas de nuestros anteriores encuentros en esta misma ciudad y en esta misma cama. Después de semejante sesión cinematográfica me sobrevino un estupendo dolor de cabeza y un asco de vida que me dejó insomne hasta bien entrada la madrugada. Normal, dice mi hermano, o es que crees que vas a dar puerta a ese maricón en un plis plas. (Lo de maricón solo se lo consiento a Pablo, que lo ha conocido muy bien y está tan decepcionado como yo).

Hace mas o menos un año los cuatro alquilamos un barco pequeño y pasamos una fantástica jornada de pesca, bocadillos, cervezas y amor. Recuerdo casi cada segundo de mar y besos, de baños, de risas, tan nítido se me presenta todo que parece que acabara de ocurrir. En otra ocasión hicimos paella en este apartamento, que se quemó enterira, - casi quemamos toda la cocina- se nos escapó el perro de Pablo con el revuelo, apareció con una vecina madurita que luego se ligó al dueño, (ay, Pablete, qué ha sido de ella ) y así podría enumerar anécdotas y momentos de verdadera felicidad, a sabiendas de que suene demasiado empalagoso. Es decir, que Pablo y Arturo hicieron muy buenas migas, congeniaron con una facilidad pasmosa pese a las escasas ocasiones que pudieron verse, dada la nula disponibilidad de mi novio casado. Los dos tenían mucho en común, porque son abiertos, alegres, vitales, optimistas, .......¿He dicho ya que Pablo y yo somos mellizos? ¿Y que nos parecemos tan poco que podríamos ser primos lejanos? Sólo compartimos la sonrisa y las ganas de vernos tan a menudo como podemos. Cuando vengo a visitarlo siempre siempre siento la necesidad de ponerme ropa suya, una camisa o un jersey encima de mi falda vaquera y así vestida me voy a caminar por el paseo marítimo, justo debajo de su casa. A veces me mira desde la terraza y me silba como un camionero, o me suelta tal guarrada a grito pelado que se me suben los colores, aún sabiendo que salen de su linda boca. Y si tengo el dia inspirado, alzo la mano con gesto palabrotero y le señalo obscenamente. Ese es nuestro juego habitual. Mi hermano tiene eso que se llama Angel. Ahora que lo pienso es posible que me enfunda sus ropas como un acto sagrado, con el oculto deseo de que un pedacito de su divinidad se me pegue en estas ceremonias descaradamente paganas. Ojalá fuera tan fácil.

Después de hablar de él me encuentro mucho mejor, como si me protegiera sin pretenderlo, como si nombrarlo obrara el súbito milagro. Lo quiero con locura y mas aún cuando compruebo que gracias a sus mimos adustos de enfant terrible consigue que hoy me sienta hasta feliz. Así que Arturos del mundo, iros a la mismísima M. Yo me voy a dar un baño y a tostarme al sol como una reina. He dicho.

viernes, 15 de febrero de 2008

Las vacaciones de Sandra........Lámina 4

LLevo 4 dias en la playa, en un apartamento alquilado junto al de mi hermano Pablo, que vive aquí todo el año. Suele avisarme cuando queda libre y me dice "rubita, vente pal mar que te sentará bien".Vive con su novia, la de turno, que yo ya he visto pasar por sus fauces unas cuantas, pero es que mi hermano tiene un salero y un encanto y una sonrisa que no me extraña que las vuelva locas. Y encima es noble. Ya quisiera uno así para mi, pero menos mujeriego.

Llevo cuatro dias aquí, digo, y los cuatro llorando, no podría ser de otra manera. Se suponía que durante estos 10 dias Arturo podría pasar conmigo al menos 2, aprovechando un viaje de trabajo a Málaga. Yo acoplé alegremente mis vacaciones a él y resulta que él se está acoplando a Roberto, y por ello yo me acoplo a todo gin tonic que mi hermano me pone delante cada noche, porque me ve lánguida y ausente y lo tengo de los nervios. Me dice que me estoy quedando flacucha, mira, eso que saco del plantón del capullo ese. Esto se llamaría, si tuviera mas humor en estos momentos, "cadena de favores" ¿no? Pues eso. Luego llega su chica, una malagueña guapetona y un poco cursi, pero buenaza, y me suelta que ella tiene muchos amigos solteros. Es muy jovencita y me enternece las miradas lastimeras que me echa; mi hermano le debe haber contado toda la historia de mi amor casado- gay y debe pensar que soy tonta de remate, o sea, tontaelculo como se dice vulgarmente, por no haberme dado cuenta antes de la pluma de mi amante, ay....... si yo le contara. Cómo le digo a esta incauta que mi Arturo lleva siempre puesta una pulsera de cuero negro y plata que le había regalado su Rober en plena explosion de sus amores, que cuando me metía mano debajo del sujetador me raspaba con ella, y yo deliraba de placer pensando que mi belleza y mi buen hacer habían triunfado sobre su macho ibérico. Eso es , deliraba. Bah, no merece la pena contarle nada, ni a ella ni a nadie, esto no hay dios que lo entienda. Visto lo visto creo que pasaré el resto de mis vacaciones como el primer dia en que llegué, llorosa y borracha, borracha, borracha, borracha, y llorosa.

jueves, 14 de febrero de 2008

El final de Arturo...................lámina 3



Esta mañana al abrir el ordenador en la oficina, lo primero que ha saltado a mi vista es este email de Arturo. Ni siquiera ha tenido la delicadeza de mandármelo a mi cuenta personal de tan nervioso como debía estar. Eso si, marcado con prioridad alta, un detalle muy de agradecer si lo que quería era joderme el dia anterior a mis vacaciones.


" Mi querida, querida Sandra: no puedo pedirte perdon por lo que vas a leer ahora ya que seria el colmo del egoismo esperar que me perdonaras y soy consciente de que nada merezco. Me escudo en esta pantalla para decirte todo lo que ayer no pude cara cara, tan absorvido como estaba entre tus brazos y consciente de que seria la ultima vez que te haria el amor. Tu no podias saberlo y de ello me culpo pero ahora ya es tarde y aun guardo la esperanza de que tu intuicion de mujer te hiciera notar ese algo que siempre sabeis interpretar de nosotros. Lo que quiero decirte, Sandra, es que no voy a volver a verte y esta vez no hay marcha atras. No me taches de cobarde como otras veces que puse tierra de por medio por temor a mi mujer, o porque mi hija pequeña estaba en el hospital. No es que vuelva con ella harto de nuestra clandestinidad y satisfecha mi vanidad masculina. Su presencia en mi vida sabes que es apenas perceptible y jamas mujer alguna podra compararse a lo que tu has supuesto para mi, la ilusion y magia que has puesto en mis dias y mis noches, tu generosidad conmigo, tu paciencia esperando una llamada , mirando siempre al movil por si yo te proponia un encuentro, tus fines de semana sin mi y sin atreverte a reprocharme nada. Sandra, no es el hecho de que este casado lo que me aparta de ti- como te voy a decir eso despues de estos casi 3 años juntos -. La verdad es otra. He vuelto a acostarme con Roberto. Hace un par de meses tuve que viajar a Sevilla por trabajo, quiza lo recuerdes. Roberto tambien estuvo alli y bueno, ya te puedes imaginar. Siempre estuviste alerta con mi aventura homo del pasado aunque me agradeciste habertela contado,que sabia eres, cariño. Pues ya ves estaba destinado a volverlo a ver y a caer en sus redes como un gilipollas, porque soy un gilipollas, porque se que es el mayor hijo de puta que haya conocido jamas y aun asi no puedo resisitirme. No se como voy a salir de toda esta historia de mierda en la que me estoy metiendo pero una cosa si tengo clara y es no hacerte mas daño de lo que ahora mismo te estoy haciendo. Mi niña, ojala pudiera darte un abrazo en este momento. Me voy a la cama, son las 3 y no concilio el sueño y se que no voy a pegar ojo en lo que me queda de noche. Me lo tengo merecido. Y si mañana meto la pata en mi reunion con los ingleses pues que me den.

Te quiero, Sandra, mi niña, a mi manera no dudes nunca que te quiero. Busca alguien que sea libre como tu y mucho menos cabron que yo. Arturo "


Con lágrimas en los ojos y llena de una infinita rabia he cerrado el ordenador, no sin antes bloquear su cuenta para siempre como correo no deseado. He ído al aseo y me he echado encima todo el agua del mundo para borrar las huellas de su desamor, y he vuelto a mi mesa con las gafas de sol puestas. Mi jefe lo ha notado pero no me ha dicho nada, él sí que es delicado, lástima que también lleve anillo de oro en su mano derecha. Y mañana me cojo 10 dias de vacaciones, una vez mas con el corazón roto, como siempre, pero de otra manera.

martes, 12 de febrero de 2008

Casi yo.............Lámina 2


Para ir abriendo boca con respecto al asunto de las láminas robadas al tal Jorge, no se me ha ocurrido nada mejor que sacar a la luz esta muchachita de rosa. Porque según cómo se mire y salvando las distancias, resulta que tiene un cierto aire a mí y de ahí que la muestre a modo de presentación. Conste que me dá cierto pudor, carajo, se necesita ser tonta. Perdón por el carajo, que suena algo burdo con esa jota bien marcada, yo no suelo escribir tacos nunca, aunque sí los suelto con alguna frecuencia en mi conversación. Ultimamente me dá por esos que llevan jotas por todas partes, imaginad cuáles, tan ordinarios y machorros ¿a que no pegan con esa cara modosita? Pues así soy y así me presento, una amalgama bien revuelta del bien y del mal, del claroscuro en toda regla, del alma y la bestia que tan certero definía Xabier de Maiestre viajando alrededor de su habitación.......pero no nos vayamos del tema.
Y como veo que el tema va derivando hacia mí misma, casi mejor lo dejo, carajo y demás jotas unidas , que me dá mucha vergüenza.

Cien años de perdón

Merodeaba yo -ultimamente merodeo mucho -de flor en flor, digo de blog en blog , cuando mis ojos han dado con una página llena de mas o menos bellas historias y mucho mas bellas estampas de todo tipo. Tanto me han gustado que , ni corta ni perezosa, he procedido a apropiarme de cuantas me han venido en gana apovechando la ausencia del propietario, aunque él mismo aclaraba que no eran suyas tales imágenes y que si sus autores consideraban la usurpación intolerable, procedería a quitarlas de su blog inmediatamente. Con ello vengo a decir que yo soy entonces el ladrón que roba al ladrón, y por tanto tengo......ya sabéis lo que continúa el refrán tan sabio.
Hecho este pliego de descargos, ya bien acopladita en este cómodo sofá de mi salón (primera imagen vilmente sisada al interfecto), tengo que contaros que he decidido utilizar estas ilustraciones tan sugerentes para escribir de todo un poco, sobre la gente, sobre mí, en fin, lo que se me ocurra. No es que vaya a ilustrar mis post con ellas, es que voy a escribir lo que ellas sugieran, que para eso las he secuestrado con nocturnidad y alevosía, y creo que algo les debo a cambio, víctimas indefensas de mi travesura. Tenedme paciencia, que empresa fácil no es.
Para mas inri, ni siquiera puedo agradecer al primer ladronzuelo su préstamo involuntario, pues con tanto trajín de ordenador copiando a destajo, he cerrado su ventana sin querer, y ahora sólo recuerdo que se llamaba Jorge, que era profesor de algo, y que vivía en Casteldefells. Jorge, si alguna vez me lees, que sepas que lo siento.

domingo, 10 de febrero de 2008

Un Par de Menopáusicas

Hace varias noches encontré a mi hermana en el messenger e iniciamos una graciosa conversación a base de batiburrillos de ésto y de lo otro. Al parecer ella reía a mandíbula batiente en casa, de modo que llamó la atención de su hijo que se encontraba dos habitaciones mas allá y acudió junto a ella a ver qué le causaba, en soledad, tanta juerga nocturna. Mi hermana le dijo que se apartara de la pantalla, que era una conversación privada entre la tia y ella -creo, por tanto, que a esas alturas andaríamos enfrascadas en diálogos verderones -. Mi sobrinito, dolido por ese injusto aislamiento, le soltó a bocajarro : " Ya ves a mí qué puede interesarme lo que hablen un par de menopáusicas" . ¡¡¡¡...........!!!! En un primer momento no pudimos menos que soltar unas carcajadas que debieron oirse probablemente en toda la provincia de Madrid, vaya ocurrencia, dijimos, qué salado. Después ya vino un segundo momento de reflexión en el que juré : voy a matar a ese niño .
¡ Menopáusica yo ! No lo está ni su madre que me saca, digamos, x años. Que yo sepa aún no me vienen sofocos, ni cambios de humor repentinos, ni trastornos de regla, ni dolores de huesos, ni.... Si yo me veo todavía tirando a jovencita vivaracha y ligonceta, con un cuerpo y una cara aceptables y buenos ánimos ante la vida.
Tercer momento: mi pensamiento fué hacia las mujeres que atraviesan esos años críticos, a los que llegaré si Dios quiere, y si no qué lástima, y calculé cuán injustamente se las trata y se las mira con penita y condescendencia. Que si pobre Fulanita que se le va cayendo el pelo y tiene descalcificación ósea severa, que si se le han echado los años de golpe, mírala toda tristona. Por si tuviera poco también se vuelve inapetente de sexo y carantoñas, osea, el acabóse de su existencia para el género masculino, que sólo gusta de lobas frenéticas e insaciables. Y la pobre menopáusica, que le ha venido todo de golpe sin desearlo, soportando encima una depre de caballo a la que nadie presta atención porque no merece la pena, que ya se le pasará.

Así que ante el aviso inesperado que me acaban de anticipar, sin anestesia ni nada, voy a ir poniendo mis barbas a remojar; lo malo es que no sé cómo. Pero que nadie piense que entre tanta divagación he olvidado mi idea finamente amasada en el segundo tiempo de esta historia : voy a matar a ese niño aunque sea sangre de mi sangre, y , para mi defensa aduciré que fué un acto involuntario de enajenación mental muy propio de "mi estado menopáusico".

sábado, 9 de febrero de 2008

Las Almas Gemelas


Cuenta Aristófanes, en El Banquete, de Platón, que en un principio eran tres los géneros del ser humano: uno femenino, gobernado por la Tierra, otro masculino, gobernado por el Sol, y un tercero que participaba de ambas naturalezas, gobernado por la Luna. Este tercer andrógino era de forma redonda, su espalda y sus costados formaban un círculo, con cuatro brazos, cuatro piernas, dos rostros idénticos colocados en sentidos opuestos conformados en una sola cabeza y dos órganos sexuales. Caminaban erectos hacia delante y hacia atrás, mas cuando querían correr giraban en vueltas de campana, como los acróbatas, tomando una gran velocidad. Dada su peculiaridad y su participación en ambos sexos, estos seres crecieron arrogantes y poderosos, y se dice que intentaron escalar al Cielo para atacar a los dioses. Zeus, alertado, reunió en asamblea al resto del Parnaso para deliberar qué hacer ante tamaña insolencia, pues no podían permitirla de ningún modo, ni tampoco fulminar definitivamente este linaje ya que, de hacerlo, dejarían de recibir todos los honores y sacrificios por parte de los hombres. Tras varias tribulaciones Zeus dió con la solución para acabar con este desenfreno: partirlos en dos, de modo que serían mas débiles y, a su vez, se multiplicaría el número de criaturas, y por tanto mucho mas útiles a los dioses. Si de este nuevo ser que caminase sobre dos piernas hubiera aún el menor atisbo de rebelión, volvería a cortarlo por la mitad, caminando esta vez sólo sobre una, a la pata coja, quedando de nuevo mas limitado en sus actos. Dicho y hecho; ordenó a Apolo que seccionara a estas criaturas y les diera la vuelta a la cabeza para que , viendo su separación y su desgracia, se tornaran mas disciplinadas. A esta operación, curiosa donde las haya, le acompañó una serie de estiramientos de piel por aquí, apaños por allá, de suerte que tras ella se conformó perfectamente el ombligo, el pecho, dejando ciertas estratégicas arrugas que permitieran recordar en un futuro el castigo recibido antaño.

Así las cosas, una vez separados es lógico y humano que añoraran su antigua naturaleza y buscasen su nuevo acoplamiento, rodeándose con sus brazos y muriendo de inanición si no lograban dicha unión. Si una de las mitades moría, la que quedaba con vida buscaba otra y se enlazaba con ella, bien fuera mujer o varón, y de este modo perecían entre penas y frustraciones . Compadeciéndose de esta situación - y debido al insoportable caos reinante , añado yo - Zeus imaginó entonces otro ser al que habría que colocar sus vergüenzas hacia delante para que en al abrazo sexual, el hombre pudiera tropezar con la mujer y engendrar y perpetuar la raza. Si se encontrasen macho con macho, por ejemplo, Zeus imaginó -palabras textuales- "que hubiera hartura en el contacto y se dedicaran a otros menesteres de la vida"..........(esto muy discutible, claro está). Es muy interesante el desarrollo posterior de esta teoría en cuanto a la unón de mujer con mujer, hombre con hombre, y el prototipo de personalidad que ello genera: el hombre viril y valiente, el mujeriego, la lesbiana, el pederasta, el filerasta y otros caracteres a cuál mas curioso y esterotipado.
Por resumir, es este anhelo de búsqueda de la otra mitad perdida lo que mueve y motiva al ser humano gran parte de su vida. Lo que se llama Amor es, por consiguiente, el deseo y la persecución de ese Todo en el que fundirse y sentirse pleno.

He aquí una apoximación al tema de las Almas Gemelas, la Media Naranja, o como queramos llamarlo. Su discusión ya se adivina fascinante como fascinante es poner voz y oído a cada invitado en El Banquete. Cuando me acuerdo y me noto hambrienta me siento a su mesa, invisible comensal entre tanta sabiduría, y espero paciente por si alguien mas se anima, almagemela, trilliza o lo que quiera ser, y llegamos, al menos, a discutir en los postres.

miércoles, 6 de febrero de 2008

Anuncio por Palabras

O.P.A. s, Sub-Prime, Ibex 35, índice Dow Jones, compra Telefónica, sube Repsol, se mantiene BBVA, sobreponderar, apalancamiento, Dividendos, Bolsa de Tokio, Warrants, Colonial, Sacyr-Vallehermoso, familia Sarahuja, Inditex, burbuja inmobiliaria.............zzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzz.
Aviso importante: lanzo al mercado una agresiva Oferta Pública de Amor y Sex-Prime a destajo.

Blablablá

R. está preocupado porque vamos caminando y hablo muy poco, casi nada. Le contesto que está bien caminar en silencio, sin necesidad de hablar por hablar, pero no se convence. En realidad voy atenta a cada señor que me cruzo y me asombro de cuántos se parecen a mi padre, por sus viseras, sus cabezas calvas, el abrigo o las gafas, el paso ladeado o la nariz. Y pienso en que cada vez voy teniendo mas gente conocida y querida al otro lado, y no me quiero poner ñoña.
Mientras tanto, J. me pasa música italiana y me cuenta que se marcha a Venecia.

martes, 5 de febrero de 2008


DESIDIA


Hoy he amanecido perezosa como otros tantos dias, con pocas ganas de poner pié en tierra y cabeza en marcha. Me esperaban dos directores de banco , varios papeles para ordenar y releer y mi agenda de papel pizpireta y naranja. Como buena chica que soy he atendido a mis deberes con una premura contraria a mi talante , pues mi mayor deseo era volver cuanto antes a casa para sentarme delante del ordenador y aislarme del mundanal ruido. Hay dias en que no quisiera oir palabra humana alguna, en que desconectaría los teléfonos y el timbre; mi único contacto con el exterior sería la ventana de mi salón, y mis ojos sólo mirarían intermitentes bien la tv sin sonido , bien esta pantalla luminosa de mi PC. Ni siquiera sé si oiría música alguna, de tan sorda como quiero ser. Y muda. También muda.

Pero nada, mi familia siempre acecha al teléfono, mi trabajo me despereza de tanta tontuna, y la vida no me permite dormirme en los laureles mas que lo imprescindible. Será posible. Ah, y no he contado que, de vuelta a casa, con mis tacones de ejecutiva nada agresiva, mi bolso rojo lleno de nuevas tareas y números sin firmar, he parado a hacer la compra cotidiana. Vamos, igualito, igualito que un macho ejecutivo..... ¿a que si ?

lunes, 4 de febrero de 2008

Lluvia en Madrid


Mis deseos han sido cumplidos: por fin llueve en Madrid y yo estoy loca de contenta porque mi alma se ha puesto melancólica. Todo en mí se vuelve un rememorar canciones que hablen de ello : " llueve, detrás de los cristales llueve y llueve " "Raindrops keep falling on my head" (siempre preciosa, así pasen cien años), "la lluvia no moja nuestro amor cuando yo soy feliz ".....Dicen que los ángeles lloran y sus lágrimas caen sobre nosotros. ¿Por qué lloran? Seguro que hoy no tienen motivo, salvo uno muy de agradecer por mi parte, hacerme feliz - mas vanidad -. Qué me importa. Les devolveré el favor con creces. Prometo llorar a mares si ellos me lo piden.

Vanidades

Anoche estuve ojeando, ya que no hojeando, una serie de blogs que una buena amiga me había recomendado. Todos interesantes, a qué negarlo, muy personales, bien escritos y generosos en contenido, algunos envidiables en variedad de ilustraciones y textos. Me entró el pánico de no poder corresponder en la medida de lo que se me ofrecía y estuve a punto de abandonar, sine die, el proyecto que me traigo entre manos. Pero, pero, pero.....( siempre hay un pero, y en este caso poderoso donde los haya ), algo con lo que no había contado me impulsó a no cejar en el empeño : la Vanidad. No fuí consciente de ponerle este nombre tan claro y contundente en ese primer impulso; unas pocas horas después lo veo con absoluta seguridad, y sé que esa misma e imperiosa Razón es la que hace a los demás mortales crear, mimar y exponer su propio blog. A los Cuatro Vientos , por los Siete Mares y al Espacio Sideral si internet nos lo permitiera, nuestra vanidad no encuentra suficiente y amplio acomodo para sentirse plena y oronda cual damisela encinta.Así que brindo por vuestras razones que tan gratos momentos me proporcionan. Por la mia aún no me atrevo. Alea jacta est.

A una Amiga

Hoy quiero dedicar este párrafo a esa amiga con cuyo manto los dioses nos bendicen raramente, omnipresente esencia en mi vida , compañera de luces y sombras en estos veintitantos años de común andanza caballeresca, a veces Sancho, a veces D. Alonso, tan leona como gatita, voraz o serena, tantas mujeres en una y todas tan intensas. De ella surgió la idea de adentrarme en estos lares, segura como está de lo bien que lo haré y del bien que me hará. De su mano avanzaré en este embarazo blogero ¿se dirá así?. El fruto que finalmente brote será hijo mio, sin duda, mas llevará consigo los rasgos inequívocos de esa loba esteparia que, audaz, me preguntará sutilmente cómo me va en el camino.