martes, 17 de mayo de 2011

Obras, coplas, jotas

Tengo la casita toda patas arriba. Lo que era despacho será ampliación del salón y lo que era cuarto de la plancha, será despacho. El armario que abría por un lado en pocos días se abrirá por el contrario. Ando aquí enclaustrada por si surgen dudas de enchufes, puertas, color de paredes y otros imprevistos y hay tantos ruídos a mi alrededor que tengo la cabeza loquita, que diría Lola Flores.

Pero yo me resarzo con Radiolé, que a lo lejos me deja oir sus letras memorables, como una que acaba de dejarme perpleja:
"Con un cuchillo me abría yo el pecho
pa enseñarte mi corazón,
ay, qué pena te daría
de verlo negro como el carbón."

Y con ella me acuerdo de otra:
"Me voy a hacer un rosario con tus dientes de marfil, para que pueda besarlo cuando esté lejos de aquí."

Oigan ¿por qué la copla española ha de ser siempre tan trágica, que de puro paroxismo se torna cómica?
La mujer que íba a abrir su pecho con un cuchillo ¿pa qué? Si al instante caería fulminada y no podría disfrutar del arrepentimiento de su amado, que era, a fin de cuentas, lo que pretendía ¿no?
Y el Molina, dejando desdentada a su novia con el empeño de un rosario. Ala, ahí te dejo con tos los piños fuera pa que nadie se te acerque en mi ausencia, que a ver quién es el guapo que la corteja con esa boquita toa hueca como una abuela prematura. Yo veo en ésto una clara versión del cinturón de castidad, disfrazado con capa mística -por aquéllo del rosario-.

Pues resulta que, en medio de estos arranques cuasi-escatológicos, también hay modalidad jota aragonesa:

"Anda y pínchame una venaaaa
si piensas que no te quieerooo,
y verás correr mi sangreee
negrita de pasar penaaaa"

Ay, la Virgen, yo es que me parto enterita.
Y, de pronto, han cesado los ruídos a mi alrededor.

5 comentarios:

Javier dijo...

Si es que a nivel de pueblo aquí lo que va es el drama por todo lo alto, o sino cómo crees que la de San Blas ha llegado a estrella que no estrellada mediática.

José Miguel Ridao dijo...

Bueno, esas letras son para partirse (de risa, no de pena). Yo este tipo de letras las veo bien en el flamenco, que es un cante desgarrado; en la copla quedan ridículas, y en la jota ya ni te cuento.

Un beso, konsto (palabra de verificación).

Mery dijo...

Pe-Jota: no me extraña que en el extranjero nos miren como bichos peculiares. En no sé dónde hicieron una tesis doctoral sobre el fenómeno de Belén Esteban, tela marinera.

José Miguel: las palabrejas de verificación son un petardo pero a veces tienen guasa, ya veo.
Seguramente habrá por ahí letras de canciones aún mas peliagudas, pero sería un no parar.

Un abrazo a ambos y buenas noches

Madame X dijo...

Es que llevamos el dramón en la sangre. A mí siempre me ha llamado la atención el tremendismo en los nombres, sobre todo femeninos.
Dolores
Socorro
Angustias
Tránsito
Auxiliadora, etc.

Mery dijo...

Huy, si, Madame, una amigo francés me comentaba que para él eso de los nombrecitos era de lo mas histriónico, sobre todo si lo traducía a su idioma.
Besos