En este mundillo laboral en que me muevo desde hace unos años, ayer me dijeron por enésima vez la siguiente frase:
"Ya sabes: vista larga, paso corto y mala intención"
Todo un problema para esta servidora, que carece de las tres premisas, a saber:
1.- Vista larga para adivinar los entuertos futuros o futuribles de alguna mente perversa.......Cero.
2.- Paso corto y acechante de alimaña, para avalanzarme sobre la presa moribunda o para cambiar de rumbo cuando vengan mal dadas.......Cero.
3.- Mala intención, es decir, propinar manotazos a diestro y siniestro, procurando el daño ajeno de antemano y sin provocación aparente.......Cero.
Visto lo cual, creo que estoy en el bando equivocado, y presumiblemente, vaya a ser yo la sufridora sufriente de las vistas largas, pasos cortos y malas intenciones de unos cuantos colmillos asesinos disfrazados de blancos y lindos corderitos.
Dicen que en la vida se aprende de todo y de todos, pero hay rasgos consustanciales al ser dificilmente mutables. Ni me da la real gana de cambiar mi natural bienpensante, pues las resultas de esta permuta en mi comportamiento vislumbro puedan ser perjudiciales para mi carácter en una proporción desmedida. Que no me compensa, en otras palabras.
Así que sonreí a mi interlocutor, contesté a su frase con un anacoluto digno del mejor cambio de tercio en Las Ventas, y me juré a mí misma seguir siendo como soy, una Brujilla Traviesa de poca monta que sólo se sirve de su escoba, en forma de ingenio, para pasar por esta vida como Dios le da a entender.
9 comentarios:
En resumen, se lleva el modelo borde nacional, eso hace tiempo que lo vengo comprobando debido a mi trabajo, mentalidad estrecha, mezquindad a raudales, prepotencia y mala educación, todo ello regado con amplias dosis de incultura,¡¡qué país!!
Vaya consejitos, Mery. Quienes los dan, creo yo, son los primeros causantes de aquello de lo que tanto se quejan. Lo más gracioso de todo es que cuando ven a alguien con buena intención, se empeñan en apadrinarlo para el lado oscuro, como si supiesen ellos más de la vida. Un besín!
¡Hola Mery!:
Gracias por tus últimas visitas. Ya me siento bien.
Sobre lo que nos cuentas, oye, qué mal consejero. No me gusta nada nada lo que te dijo. Yo, lo contrarrestaría con unas palabras evangélicas, que son éstas: "Sed astutos como serpientes y sencillos como palomas". Si los adultos fuesen como el chiquitín de la tragedia que ya conoces, que era un angelito puro, no habría cuidado; pero los adultos no somos así. Entonces, cuidado con ciertos elementos, diría yo; por lo demás, el paso no tiene que ser tan corto, sino, seguridad en tí misma; y, de malas intenciones, nada de nada; yo, desde luego, nunca las he tenido.
Otra cosa, Mery: ¿podría abrirte un link para acceder con facilidad?
Un beso.
Mery, todo un primor ese compañero (o jefe) tuyo. Sus palabras describen bien a un ave de rapiña, como el halcón o el águila, aunque estas tienen la nobleza de no tener la mala leche humana. Se parecen mucho a otras que he oído alguna vez: "ojos y oídos abiertos, pero boca cerrada". Creo que lo de vista larga va por ahí, y es, entre otras cosas, una forma sutil de invitarte a una futura traición: "para que no se te escape nada... y luego vas y me lo cuentas".
Saludos.
En la vida no se está, se és; asiq ue me parece muy bien que sigas siendo tú, más cuando estás tan a gusto contigo misma
"Ni me da la real gana de cambiar mi natural bienpensante, pues las resultas de esta permuta en mi comportamiento vislumbro puedan ser perjudiciales para mi carácter en una proporción desmedida. Que no me compensa, en otras palabras."
Me llevo algunas de tus palabras, brujita.
Un beso
Querida Mery, si eres un poco brujilla pues tranquila, que lo de la mala intención ya lo tienes ganado...(en los temas laborales, se supone). Por lo demás, sé tú misma siempre.
Como puedes comprobar mis fotos son de cosecha propia y mi idea es renovarlas mes a mes temáticamente.
Bueh, ya que estás en el bando equivocado, te invito cordialmente a que te pases al lado bueno, es decir, al lado donde me encuentro yo, así podremos discutirlo ampliamente...
Sí, ya sé, soy un pesado...
Di que sí, Mery: ¿por qué va a ser malo ser bueno? A mí no me ha ido tan mal intentanto emular a Antonio MAchado y siendo, en el buen sentido de la palabra, bueno...
Mi querida Mery... el del consejo es un imbécil redomado. Aunque eso ya lo sabes tú, que, conociéndote como te conozco, jamás seguirás semejante proclama.
La creencia de que en los negocios hay que ser un tiburón (pobres tiburones) sin escrúpulos, es totalmente falsa. Está alentada por gente mediocre con una codicia desmedida. Son los que hacen la basura de este mundo.
Por cierto, que bien te sienta la escoba... ¿Qué piensas barrer con ella?
Besos.
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