sábado, 24 de mayo de 2008

Las contradicciones


Viernes 23 de mayo.

Hoy no tengo nada que hacer, estoy sola en casa y tengo astenia primaveral.

Llueve benditamente sobre Madrid; dudo si ver el espectáculo desde la ventana o salir a pasear sin rumbo con el gorro en la cabeza y La Manía bajo el brazo. Ultimamente cargo mucho con el libro en mis paseos por si encuentro, al final del camino, una cafetería de grandes ventanales donde tomar un té y leer un poco. Salgo, no salgo....me lo voy a pensar al tiempo que escribo en el blog.

Mientras tecleo en el ordenador casi pierdo mis uñas pintadas de oscuro entre las teclas negras. No estoy segura de que me guste este color, de hecho a casi nadie le gusta este color. Ayer, mientras me las pintaba en el salón de mis padres, notaba con qué desagrado me miraba mi hermana y mi madre. A R. le repugna claramente. Y yo no me aclaro , pero, por llevarme a mí misma la contraria, de vez en cuando persisto con la excusa de acabar toda la laca que queda. Además tengo las manos pequeñas y me lo puedo permitir, me digo para convencerme.

Acabo de comerme tres-galletas-tres de chocolate, justo tres horas después de haberme propuesto firmemente dejar de zampar lo indebido. Da gusto tener esta fuerza de voluntad.

También acaban de ofrecerme ir al cine esta tarde. Una cierta comedia americana que, en otro momento, me hubiera tragado sin pero alguno. P-e-r-o mi ánimo está perezoso y prefiero no tener planes de ningún tipo. O prefiero ir a tirarle catorce veces de las orejas a mi sobrino, que nos invita a pasteles y toca el piano como los ángeles.

Recostada en el sofá, con el portátil sobre las piernas, hago cuentas mentales de los libros que esperan, en mi parrilla de salida, a que los saque de su olvido injusto. Los he elegido a conciencia, con amor infinito, como siempre hago cuando los compro; de todo tengo en la viña del Señor, pese a que recele de la literatura actual porque no la considere de excelente calidad (como si yo fuera Cecilia Böhl de Faber). Soy una pedante, no me cabe duda alguna; tengo las ínfulas de pensar que este blog está bien escrito, cuando sólo estoy realmente convencida de que los dignos de leer son los otros, lo de mi ronda diaria, mis recomendados.

Definitivamente voy a salir a la calle. Y me voy sin haber hablado de lo que tenía pensado hablar.
Pero es que hoy llueve, tengo astenia y estoy contradictoria.

7 comentarios:

ANTONIO SERRANO CUETO dijo...

Mery, dichosa tú, que dispones de ese tiempo precioso que te permite elegir morosamente entre varios proyectos. La lectura de tus entradas, pese a tus dudas, siempre son muy gratas. Entre tanto blog sesudo (algunos, monolíticos), el tuyo siempre es reconfortante. Saludos sabatinos.

Juan Antonio González Romano dijo...

Este blog está bien escrito. Tienes una propensión a poner más de tres puntos suspensivos (cuando este es el número normativo) pero, salvo por eso, el blog está bien escrito, insisto. Somos muchos los enganchados y creo que concilia más elogios que el color de tus uñas, por lo que veo.

Ester dijo...

Genial,y por supuesto que está bien escrito

Madame X dijo...

Punto nº 1: Tu blog no sólo está muy bien escrito, sino que además es ameno y dinámico, lo que es una bendición para quienes te leemos siempre. Enganchaditos nos tienes.

Punto nº 3: La primavera, querida, no es precisamente la estación que mejor te sienta, aunque este año has tenido más lluvias de las esperadas. Con lo que te gustan a ti. Así que deberías estar más animada. Aunque te entiendo muy bien, hay días tontos en los que una no sabe muy bien qué hacer con ellos.

Punto nº 3: Seguro que el esmalte de uñas rojo oscuro te queda de fábula. No hagas caso a nadie. Precisamente tú te lo puedes permitir, con esas manos tan cuidadas y bonitas.

Un besito, guapa, buen finde.

Mery dijo...

A Madame está claro que no hay que prestarle mucha atención, porque su cariño hacia mi persona (que es mutuo, desde luego) le hace ser poco objetiva. Aún así , te agrdezco tus reconfortantes palabras.

A los demás deciros que siempre es grato saber que me leéis con asiduidad y calidez. Pero no me gustaría que mis palabras hayan sonado a reclamo para que alabárais mi buen hacer en este blog. Nada mas lejos de mi intención; sólo eran meditaciones en una mañana de lluvia.
De todos modos, sois estupendos. Vuestros blogs hablan por sí solos.
Un beso a todos.

Javier dijo...

Y que bien te sienta esta indolencia !!

Anónimo dijo...

Algo ha fallado en mi primer intento (primero y tardío):
"este blog está bien escrito"