lunes, 1 de noviembre de 2010

En cadena dos


Cuando las cosas vienen naturalmente encadenadas no debemos ponerles freno, algo querrán decirnos.
Lástima que mi última entrada y esta de hoy no la lean precisamente quienes deberían leerlas.
En mi agenda han aparecido dos citas seguidas hablando de las mismas aguas turbulentas; aquí las dejo.
"¡Qué felices son los pesimistas! ¡ Qué felicidad la suya cuando demuestran que no existe la felicidad!
Marie von Ebner-Eschenbach
"No hay ningún viento favorable para el que no sabe a qué puerto se dirige"
Arthur Schopenhauer

9 comentarios:

Olga Bernad dijo...

La de Schopenhauer es un hallazgo. Y es una situación mucho más triste, porque no se arregla ni con vientos favorables. Sin embargo, el que sabe a dónde va, tiene al menos la oportunidad de luchar contra vientos y mareas. Pues eso, Mery, que, si perdemos la alegría, al menos no perdamos del todo el norte.
Un beso bien mañanero.

Juan Carlos Garrido dijo...

Felices los pesimistas, ya que los hechos siempre superan sus expectativas (esta es mía).

Saludos.

marinero dijo...

Yo diría más bien: felices los pesimistas, ya que, ocurra lo que ocurra, ellos siempre estarán convencidos de que tenían razón (e incluso de que la realidad ha superado sus expectativas). Su convicción es férrea: a prueba de hechos.

Mery dijo...

Olga: en la medida de lo posible hay que intentar no sumirse en la tristeza. Fácil de decir y a veces muy difícil de conseguir. No será nuestro caso en tanto tengamos nuestros blogs y las visitas amigas.
Un beso de buenas noches.

Sombras: tu máxima habría que imprimirla en mi agenda. Véritas veritatis.
Un beso

Marinero: te doy la rezón en que su convicción es férrea pues los, gracias a Dios, pocos, pesimistas que conozco son inamovibles. Irritantemente inamovibles.
Buenas noches

Аmanecer dijo...

Que triste, el del pesimista, y el que no sabe hacìa a que puerto navega.

A veces no se le da importancia a esas señales, que algo nos quieren decir.

Todo lo que hay en mi casa, que es tuya tambièn, lo puedes tomar.
Gracias por seguirme visitando!

Besos

Unknown dijo...

Schopenhauer, nunca estuvo más vivo que actualmente, buscas respuestas, él te las da, buscas ser feliz, asume la realidad y piensa que no estás aquí para ser feliz y encontrarás la tranquilidad.

Audrey dijo...

No envidio su felicidad, si es cierta...
Me siento una optimista que intenta no dejarse vencer por las nubes, que en el camino encuentro...

Saludos,

Madame X dijo...

A Schopenhauer le tengo yo bastante manía, era un misógino de tomo y lomo. En realidad, como muchos de su época.

A los pesimistas les puedo entender, pero no aguanto a los que se recrean constantemente en sus miserias. Acaban por convertir en miserable todo lo que tocan.

Un besito,

peregrino dijo...

Es cierto que no hay viento favorable para el que no sabe donde va, pero tampoco hay viento contrario. Claro que...... 'quien no teme nada, no ama nada'.